UN DÍA EN CAUCE BOSCOSO
Nada más llegar al pequeño pueblo de Cauce Boscoso me encuentro con un chico que discute acaloradamente con su madre. Me levanta cierto reparo la discusión, en plena calle, aunque finalmente me decido por acercarme al muchacho cuando la discusión ha terminado (por lo que parece, la madre había visto un dragón... pobre mujer). Tras una leve conversación, donde le cuento mi intención de llegar a Hibernalia, el ataque de la guerrera (por lo visto unos bandidos han tomado la mina al asalto) y la enorme cantidad de lobos en la zona (algo habitual según parece), le pregunto por alguna tienda cercana y si hay posada en el pueblo. Muy amablemente me da indicaciones de la tienda de Lucano Valerio (seguro que es la misma que me indicó Hadvar en la ciudad de Helgen) y me recomienda la posada de "El Gigante Dormido".